El viento sopla… la noche ha caído; y ahora sólo
las duras sombras provocadas por los débiles cuerpos de una mujer en cuclillas,
otra tumbada al suelo, y un hombre suplicante por el advenimiento de su
primogénito, se ven estrepitosamente proyectadas hacia la roja roca de la cueva
debajo de una estrella, donde se albergan dichas infortunadas personas. Minutos
después ha nacido ya… ¿Siddhartha Gautama?
Bien, creo que hemos dado un giro inesperado
al inicio de los muchos inicios que en materia de religión se pueden dar y claro está. Como es ya sabido, la mayoría de
la población mundial es cristiana y seguramente habrán tomado el inicio del
relato como un lindo cuento más de paz y verdad cristiana. Lástima que lo que hemos
de narrar hoy es más una burda estadística.
Siendo 8 de Abril, en el año 563 Antes de
Cristo, ya nacía en la antigua India el ahora conocido como fundador del
Budismo, aquella religión vertiente y culminante de toda la generación hinduista
desde sus primeras manifestaciones trimúrticas como lo fueron los Vedas, para
ser luego los Brahmanes, Hare Krishnas y el final se resume todo en un hombre
sin religión y más con una filosofía. La gruesa fuerza del embudo sí que se
definió en esto llamado Budismo.
Pero la historia no acaba ahí, puesto que al
pasar los años esta gota salida del embudo ha logrado una expansión tan grande,
que ha llegado a caudales a miles de personas alrededor del mundo empaquetada y
lista para, como se decía en los 80’s: WASH AND WEAR. En realidad la facilidad
con la que se accede a esta religión es un pase doble, así como ahora se es un
jo’puta, mañana puedes ser el hombre más espiritual y trascendente con solo 3
horas a la semana y 10 libros de budismo tántrico de a 200 pesos cada uno… Carajo
si tan sólo los judíos hicieran así de fácil y económico el acceso a la
religión.
¿Quieres ser budista? Ve a Donceles y listo.
Y qué decir de la decadencia moral y
espiritual como la que viven países como América del Norte, tan influenciada y
dividida por el imperialismo Yanqui, y taladrada hasta la medula de “consumo y
perversión” que a leguas se nota la necesidad de consumir algo que no sea Microsoft,
Coca Cola o MTV. Ese intento de salir del “adormecimiento” imperialista en el
que sienten vivir, ha llevado a aproximadamente 6 millones de americanos (¡6
millones! Hasta suena a numero cabalístico) a refugiarse en el budismo… negocio
redondo.
Es interesante este dato enfrentado contra
los 2 millones de europeos que siguen dicha doctrina de Gautama, contando que
EEUU tiene 300 millones de cabezones y Europa 739 millones, es decir, poco más
del doble… ¿Será que Europa de una u otra forma cuenta con raíces firmes y
VERDADERA diversidad cultural desde sus antepasados, y no la diversidad
cultural prefabricada al estilo americano de yo machin y tu jotin, y por ello no requieren de una búsqueda de espiritualidad
para llenar algún vacío que lleven dentro?
Como sea, aun con todo y sus 6 millones de budistas, América
del Norte no está a salvo del ataque que lanzó recientemente Corea de Norte en
calidad de ”Alerta Nuclear”… y qué decir que Corea del Norte tiene predominancia
de religión budista desde hace miles de año. Qué cosas.
Y ésta es la segunda parte de la historia,
los agachados y los que ven por encima de los hombros, pues el pueblo budista
de Corea difícilmente podría llenar de buen karma y abrir los shakras de sus líderes
rojos, estos que por lo que se ve quieren dejar el nirvana para varias miles de
vidas a futuro.
Qué cosas, ni la magnanimidad de Budha logra
detener la retorcida mente de la diversidad humana. Ahí está por decir un
ejemplo: su par de estatuitas de Bāmiyān,
que a pesar de sus 55 metros de alto, no lograron resistir los
bombazos que les ordenó lanzar el régimen Talibán en el 2001, y qué decir de que
los talibanes también se traen entre ojos a EEUU por ser una cuna de
libertinaje y mal vivencia.
Pues ya, el detalle aquí está en que mientras
nos centrábamos en ver un poco de lo actualmente budizado, se nos murió Pablo Diego José Francisco de Paula Juan Nepomuceno María
de los Remedios Cipriano de la Santísima Trinidad Ruiz y Picasso a la edad de
91 años. Como dice el dicho: “mientras unos nacen, otros mueren”.
2 comentarios:
no cabe duda que esta IN-HUMANIDAD esta cada vez peor, de que sirve darnos golpes de pecho y pregonar amor y paz si no actuamos en consecuencia, es lamentable =(
Así es, pero bueno esperemos que algún dia caiga un meteorito en toda la extención del mundo jejeje.
santo remedio
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